Para muchas personas, cambiar la apariencia del cabello es una decisión muy difícil de tomar, pues sentirse conforme con la imagen proyectada al exterior constituye uno de los aspectos que más cobra relevancia. Por esta razón, existen cortes que exaltan positivamente los rasgos del rostro, además de disipar las facciones que generan inconformidades. Como resultado de las solicitudes realizadas a través de redes sociales, Enfoque Caribe compartirá aquellos estilos que le serán favorables de acuerdo a su fisionomía.
CORAZÓN. También conocido como triangular, este tipo de rostro tiene más amplitud en el área de la frente; además de ello, las mejillas son pronunciadas y la barbilla prolongada. De acuerdo a estas características, se recomienda optar por lucir el flequillo recto, con una extensión que llegue hasta las cejas; esta clase de corte favorece debido a que oculta la parte superior de la cara, no haciendo ver la frente de mayor tamaño. Por otro lado, es posible complementarlo dejando que el resto del cabello pase la zona de los hombros.
REDONDO. La carencia de definición en los ángulos es una particularidad en los rostros redondos, pues todas sus facciones son delicadas y las mejillas se extienden sin llegar a marcarse. En ese sentido, al momento de elegir un cambio en el cabello, es indispensable inclinarse por aquellos que hagan ver la cara alargada; y el curtain bangs —flequillo de cortina—, es la opción más viable, ya que proporciona un aspecto voluminoso. Su distinción con el corte recto radica en la separación de las hebras, dibujando una línea pronunciada en la mitad de la frente.
ALARGADO. La característica que distingue a las personas con este tipo de rostro es la extensión que posee la parte vertical de su fisionomía. En ese sentido, tomando como base dicha particularidad, tiene la alternativa de disminuir esta prolongación excesiva a través de un corte con flequillos ubicados de lado y lado, los cuales a su vez deben poseer diversas capas cortas —similares a las propuestas en el capeado—, en aras de añadir la mayor cantidad de volumen posible en la zona, especialmente en el lugar donde se encuentran localizados los pómulos.
OVALADO. El rostro ovalado es uno de los más equilibrados, por ello, muchos cortes y peinados les son viables; sin embargo, siempre prima alguno en particular y en este caso se trata del capeado, pues las múltiples capas suaves que lo integran, otorgan volumen a la cara, disipando considerablemente la definición de la barbilla. Cabe destacar la necesidad de emplear una extensión mínima en cada una de ellas, en aras de concederle mayor movilidad al cabello. Además, acompañarlo con el flequillo de cortina le dará un toque especial y acertado al look.
DIAMANTE. Se identifica solo fijándose en los pómulos y la barbilla, debido a que las mejillas suelen estar acentuadas y el mentón bastante definido. De esta manera, la mejor opción para disminuir visualmente el tamaño de la primera zona referenciada, es mediante el pixie —un corte arriesgado que ha logrado ser acogido por muchas personas en los últimos años—, pues al concentrarse la mayor parte del cabello en todo el centro de la cabeza, se equilibran aquellas áreas que están pronunciadas en el lado inferior. Asimismo, optar por peinarlo hacia adelante ayudará a nivelar las proporciones.
CUADRADO. La prolongación del mentón y la frente, así como los laterales alargados, describen un rostro cuadrado; Paris Hilton y Angelina Jolie, son algunas celebridades con estas características faciales. De acuerdo a lo anterior, la sugerencia en materia de corte apunta a optar por una extensión considerable, preferiblemente tipo XXL, pues permitirá disminuir la amplitud horizontal de la fisionomía. Asimismo, el uso de una capa en la parte baja contribuirá a la generación de este efecto visual, y el flequillo a la altura de las cejas armonizará las zonas superiores e inferiores de la cara.
RECTANGULAR. A diferencia del anterior, el tipo rectangular se distingue porque los lados superiores e inferiores poseen el mismo tamaño y es significativamente alargado. Por tal motivo, el corte de cabello favorable es aquel que proporcione mayor volumen en el área horizontal del rostro y menor en la vertical. En ese sentido, el flequillo direccionado hacia un lado es una opción acertada, pues el recto o cortina solo afianzarán la apariencia cuadrada. Asimismo, se sugiere añadir un semirecogido, también dirigido a un extremo, armonizado con algunos mechones sueltos para dar movimiento.
