A pesar que las mujeres han sido encasilladas a ciertas esferas, durante mucho tiempo han probado tener aptitudes para aportar positivamente a la comunidad; por ello, a lo largo de la historia, logra verse la lucha en pro de los derechos, la igualdad y equidad de género, buscando oportunidades para soñar, ocupar cargos importantes, desempeñarse en el mundo laboral, tomar decisiones; en conclusión, ser reconocidas como miembros de la sociedad. El camino ha sido difícil, pero han alcanzado grandes logros, demostrando las capacidades en diferentes campos, asumiendo retos y probando que, aunque ejercen la maternidad con gran felicidad, también tienen habilidades de lideresas, empresarias, médicas, gobernantes y demás. Debido a lo anterior, La Revista Enfoque le presenta cinco madres emprendedoras que logran sus objetivos en todos los ámbitos de su vida.
SOLEDAD MARTÍNEZ APARICIO. Al ingresar a la universidad, Soledad escogió Administración de Empresas, permitiéndole acceder a empleos donde tuvo la oportunidad de manejar equipos de trabajo y buenas relaciones interpersonales. Hace aproximadamente 11 años decidió tener su primer hijo; sin embargo, para esto se veía obligada a abandonar el cargo ocupado, ya que “en ese momento laboraba como programadora de producción en una multinacional de productos químicos”, rememora; al poco tiempo de renunciar, quedó embarazada de Camila. Siempre se ha caracterizado por ser muy inquieta; debido a ello, exploró el mundo de corredora independiente de finca raíz, tarea desempeñada en modalidad freelance hasta que la niña cumplió 3 meses de nacida y pudo incorporarse a otra organización. Actualmente, Soledad tiene 3 hijos y un emprendimiento de decoración, diseño de interiores y fabricación de mobiliarios, llamado Home Delights.
La emprendedora declara: “Hoy en día, la mujer no solamente cumple con la faceta de esposa o mamá, puesto que ahora tiene un protagonismo significativo dentro de la sociedad a nivel profesional; entonces, necesita ser muy organizada para poder cumplir con las expectativas”. En ese sentido, resalta la relevancia de levantarse temprano, facilitándole preparar a los niños —Camila de 11 años y Juan Andrés de 9—, enviarlos al colegio y pasar algo de tiempo junto a la pequeña Francesca; posteriormente, desarrolla las actividades laborales; ante esto, agradece la independencia, porque puede ajustar el horario, logrando asistir a las citas importantes de sus hijos: “Trato de mantener el balance, evitando que ninguna de las dos partes se vean afectadas, pero siempre teniendo claro que la prioridad número uno son ellos”, determina. La maternidad ha aumentado su sensibilidad y humanidad, ayudándole a apreciar el equipo de trabajo como una familia, deseando el bienestar de todos; así pues, el emprendimiento es fundamental, por lo cual hace grandes esfuerzos, buscando ver la empresa consolidada.
EMELIE JIMÉNEZ. Estudió Psicología, con maestría en Psicoanálisis, pero actualmente es makeup artist, llevando a cabo diferentes proyectos en torno a dicha industria; igualmente, es madre de dos pequeños, por lo cual comenta: “Balancear los roles como esposa, mamá y el mundo laboral es muy difícil, porque casi siempre terminamos enfocándonos en uno”; a pesar de ello, ha comprendido que el equilibrio está en darle la importancia a lo esencial: la familia; sin embargo, diariamente brinda el mayor esfuerzo para alcanzar los objetivos y hacerlo de excelente manera dentro de las posibilidades. Al tener su primera hija, recuerda haberle dedicado el 100% del tiempo: “Lo disfruté mucho, creo que fue la mejor decisión y tengo eso guardado en mi corazón”; posteriormente, cuando cumplió unos cuatro meses, empezó a incorporarse nuevamente al trabajo y la vida social.
Para Emelie, es fundamental enseñarle a sus hijos que los sueños pueden conseguirse, si trabajan de manera ardua, dando el mayor esfuerzo; asimismo, a través del ejemplo, anhela capturar la admiración de ellos, pues considera que es “un sentimiento muy poderoso, el cual, incluso, te impulsa a ser mejor persona”, menciona. Como madre, conoce las dificultades de seguir tantos roles, pero los deseos de cumplir cada propósito y ejercer su pasión, también son importantes; por eso, crea planes laborales, con el fin de distribuir los espacios y lograr aprovechar las horas disponibles durante las semanas; igualmente, explica: “Cuando tenemos metas establecidas y sabemos que debemos llegar a ellas, logramos organizar nuestro tiempo y, así, poder alcanzarlas”.
JOHANNA LOMBANA. Es especialista en Cosmetología y Cosmiatría Facial, permitiéndole, actualmente, contar con más de una década de haber inaugurado la estética integral, donde ofrece diversos tratamientos faciales, corporales, masajes relajantes, entre otras cosas. Es mamá, esposa, se encuentra casada desde hace 10 años y para esa misma época nació su primera hija, recordando que, durante el embarazo, se encontraba mudándose de local; aunque fue sorpresivo, lo considera un cambio positivo, pues le ayudó a concentrarse mucho en la profesión. En el periodo posterior, rememora las largas horas laboradas, pero al tener la segunda niña, decidió ajustar los horarios: “Dejé de trabajar los viernes en las tardes y los sábados, porque me di cuenta que ya eran dos pequeñas y necesitaban de mi tiempo”, explica.
Todas las mañanas Johanna despierta temprano, alista a las niñas, luego va al gimnasio y tras arreglarse llega a la estética. Los horarios están determinados; debido a ello, adaptarse a los diferentes roles no ha sido complicado, aunque acepta experimentar gran estrés en ocasiones, principalmente, porque desea cumplir con las obligaciones del trabajo y, a su vez, estar presente en cada momento en la vida de las hijas; sin embargo, considera importante enseñarles a las pequeñas a valerse por sí mismas y hacer aquello que les apasiona. Finalmente, agradece la permanente presencia de Dios en su vida y establece cómo la maternidad le permitió convertirse en alguien más sensible en el campo profesional; además, “me gusta tener todo perfecto y a tiempo; entonces, de pronto esa parte de mamá lo apacigua a uno para aumentar la paciencia”, determina.
ALITZA GARCÍA. Alitza, estudió Diseño de Modas en la Universidad Autónoma del Caribe y tiene su boutique en Barranquilla, cumpliendo, igualmente, el papel de mamá. Cuando el objetivo es desempeñar los distintos roles, declara la relevancia de la organización y responsabilidad; así pues, en las mañanas despierta muy temprano, lleva a su hijo al colegio, va a la empresa y empieza la jornada laboral; al medio día, almuerzan todos en familia y en la tarde regresa al taller, hasta las siete de la noche. Aunque al principio las experiencias y aprendizajes nuevos fueron sorpresivos, logró entender la importancia de la planeación; asimismo, debido a la condición especial de uno de sus hijos, ha necesitado “recurrir a personal especializado para ayudarlo a salir adelante, evitando que mi trabajo se vea afectado; sin embargo, ha sido gratificante ver cómo todo se puede con dedicación”, determina.
Aunque los cambios ante la maternidad fueron drásticos, “valen la pena, porque al final te motiva ver el proceso de crecimiento de tus hijos y que los has preparado para cumplir un rol significativo en la sociedad”, explica; asimismo, recalca la relevancia de enseñarles humildad, respeto a los demás y levantarse, a pesar de los obstáculos enfrentados. Del mismo modo, ellos se han convertido en “fuente de inspiración y creo que hasta hoy he aprendido a ser perseverante”; finalmente, resalta cómo al emprender es fundamental hacer las cosas con amor, entrega, recordando el papel principal de la familia y “administrar el tiempo lo mejor posible, hay días que demandan más, pero lo importante es manejar todo a través de la calma y una gran dosis de paciencia”, determina.
VIVIANA TORRES. Actualmente, es CEO de la empresa Luifer Cuello Music e influencer en redes sociales. Hace tres años se convirtió en la mamá de Mía y explica que esta nueva experiencia cambió completamente su forma de ser, pensar y ver la cotidianidad; debido a ello, el proceso de adaptación a la maternidad y el trabajo requirió mucho cariño y dedicación para “entender que son dos prioridades en mi vida y quería ejercerlas con todo el amor, dando lo mejor de mí”. Afortunadamente, Viviana puede cumplir las labores profesionales desde casa, permitiéndole tener la compañía de la pequeña cuando llega de estudiar; asimismo, expone que se levanta alrededor de las 5:30 a.m., alista a la niña, junto al papá la dejan en el colegio y luego realiza ejercicio; posteriormente, logra concentrarse en las obligaciones de la organización.
A través de las redes sociales ha conocido historias de mujeres que como ella no han detenido sus aspiraciones, a causa de la maternidad, permitiéndoles sentirse realizadas al desarrollar diferentes proyectos; así pues, destaca la importancia de “organizarnos y tener horarios establecidos, con el fin de cumplir nuestros roles a cabalidad”. Asimismo, a lo largo de la vida profesional, menciona los viajes entre las mayores dificultades, resultándole difícil separarse de la pequeña y dejarla a cargo de terceros; por fortuna, tiene a su madre, quien está dispuesta a cuidar de la nieta cuando es necesario. A pesar de ello, resalta que ser mamá la ha hecho más sensible y fuerte para enfrentar cada día; debido a lo anterior, desea guiar a Mía, facilitándole convertirse en una buena persona, que no haga daño a otros y “luche por los sueños, haciéndolo desde el alma y corazón”, concluye Viviana.
Crédito de fotografía 3: Jesús Bastidas.
Crédito de fotografía 4: Johnny Rubio.
